Asimismo, es preocupante si, apenas el niño se ríe o practica algún deporte, le reaparece la tos o, en el peor de los casos, presenta crisis de asma que lo llevan a atenderse en el área de emergencia de diferentes clínicas.
Muchas veces ocurre que, si bien el tratamiento médico es correcto, los padres no siguen adecuadamente las indicaciones del médico. Por ejemplo, le dan al niño con frecuencia el albutamol cada vez que tose, pero con la budesonida (corticoide) no son constantes, pues tiene cortisona y temen que esto le pueda afectar.
Aquí algunas recomendaciones para los padres de un niño con asma:
- Siga al pie de la letra las indicaciones del médico. El corticoide inhalado es la base del tratamiento preventivo del asma. Usado correctamente no interfiere con el crecimiento del niño ni le produce ningún efecto adverso serio.
- El salbutamol (broncodilatador) se usará para aliviar la tos y los silbidos del pecho, pero cuando el niño esté controlado, su uso debe ser mínimo (no más de 2 veces al día).
- Se recomienda que disminuyan al máximo las ropas, libros, papeles y juguetes.
- En el caso de tener mascotas en el hogar, es importante explicarle al niño que no pueden permanecer en el mismo cuarto, y negociar una salida; por ejemplo, que la mascota viva en el patio en una casita para ella. El niño podrá verla y acariciarla por momentos, pero siempre en un sitio al aire libre y luego lavarse las manos prolijamente.
- A los padres se les recomienda que no fumen, no sólo por el bien de su hijo, si no también por su propio bien. Si piensan seguir fumando, háganlo fuera de la casa y procuren no fumar dentro del automóvil, pues sólo el olor al cigarro que se impregna en los muebles, asientos y ropa puede ser un detonante del asma.
Con estas medidas se les garantiza a los padres que su niño va a controlar adecuadamente el asma y las molestias irán desapareciendo, con lo que él podrá llevar una vida totalmente normal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario